La pérdida de un diente adulto puede ser perjudicial no sólo física sino psicológicamente para la salud de una persona. Puede afectar la habilidad de masticación, el patrón lingüístico y la autoestima e inclusive conducir a una multitud de otros problemas graves. Cuando se pierde un diente por causa de lesión, defectos, enfermedad o caries, el espacio resultante puede provocar varios problemas incluyendo la debilitación del hueso alveolar que sostiene y rodea los dientes.
Esto sucede porque la estimulación en dicho hueso, que a menudo proviene de uno o más dientes faltantes, ya no se produce, lo cual con el tiempo, conduce al deterioro del maxilar, también conocido como el hueso basal. Cuando el maxilar no está siendo utilizado para sujetar dientes, se vuelve débil, pierde su fuerza, firmeza y capacidad de sostener otros dientes saludables. Los implantes dentales son, en la mayoría de los casos, el mejor modo de tratar la falta de dientes.
Los implantes dentales están hechos típicamente de titanio y actúan como un resistente reemplazo para los dientes. Tienen la forma de la raíz de un diente y actuarán como uno artificial mientras estén asegurados en su lugar. Una vez implantados, su hueso natural sujetará el implante en su lugar al fusionarse o adherirse al implante, proporcionando de este modo una base firme para unos dientes felices y en funcionamiento.
Los implantes pueden ayudar a prevenir otros daños resultantes de la pérdida de dientes, el hundimiento de los demás dientes. Cuando un diente falta por un largo período de tiempo, otros dientes se desplazarán hacia ese lugar vacío. Esto puede causar toda suerte de disgustos a nivel cosmético al tiempo que debilitan la integridad del maxilar.
Cosméticamente, un diente faltante, en especial uno de los frontales, puede ser avergonzante y llevar a la falta de confianza y desviación de las actividades diarias. Los implantes dentales se ven, se sienten y funcionan como los dientes normales, a la vez que ayudan a su boca a mantener su sonrisa natural y estimulan el crecimiento y fortalecimiento del hueso.
Mientras los implantes dentales pueden proporcionar cierto alivio al no tener que preocuparse por las caries, se necesita un cuidado bucal diario y mantenimiento para proteger el resto de su boca de caries o enfermedades. Es importante visitar a su dentista para inspecciones regulares dado que tienen instrumentos especiales para limpiar los implantes que no dañarán sus superficies metálicas debajo de las encías.
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